sábado, 9 de agosto de 2008

Yo también quiero ser un dios

El otro día veía un programa de History Channel... o Discovery. No me acuerdo. No intento hacer publicidad a ninguno, mi papá viene de vez en cuando a la casa y esos dos son los únicos canales que ve... 76 canales por gusto, solo ve 2. Bueno, volviendo al asunto, estaba viendo uno de estos dos canales y hablaron sobre el Big Bang (el origen del universo). Todo bonito e interesante, pero lo que realmente llamó mi atención fue la participación de Isaac Newton. Me ahorraré su historia y su biografía, lo importante en este caso es que él es considerado el padre de la físicá clásica debido a lo que descubrió y cómo lo descubrió. Todo lo que se aplica hoy en diversas ciencias ha tenido origen en muchos de los descubrimientos de Newton, pero los más importantes son en el área de la mecánica y la física.

Un día la vida era como la ciencia la planteó durante cientos de años, tal vez hasta miles. De la noche a la mañana viene un hijo del vecino y dice "miren... descubrí esto". Se reune toda una secta de eruditos y maestros vistiendo toga, imponiendo su nivel y status, escondidos en silencio dentro de su inmensa sala de estudios, frunciendo el ceño, mirando fijamente y con desconfianza los planos, papeles y cuadernos del extraño los cuales yacen en el suelo, tirados como cadáveres malolientes a los que nadie quiere acercarse... Pero al final de una agobiante espera, la humanidad comienza una nueva etapa gracias a la grandeza de un solo hombre.

Al final cuando uno se refiere a un genio o "el padre" de algo, siempre dice "él descubrió", "él inventó"... Nadie dice "él creó" (porque solo Dios puede crear). Pero estas personas han creado algo, han creado una ventana al avance, han creado una consciencia, y a nivel más puntual, ellos crearon una nueva forma de resolver las cosas, de definir los problemas y de plantear las soluciones. Son "dioses", a su manera, de la nueva ciencia.

Y pensando en grande, el nombre de estos dioses mortales formará parte de la historia por siempre y para siempre.... Yo también quiero. Pero a estas alturas del tiempo, crear algo nuevo es casi imposible. Lo mejor ya fue creado y lo nuevo es solo modificaciones de lo antiguo. Todos tenemos algo nuevo que mostrarle al mundo, pero lo que importa es la trascendencia. El inventor de la tinta por ejemplo, cuyo origen es tan antiguo que ya es casi imposible definir el nombre de la persona que realmente lo inventó, así que ahora solo se le atribuye el logro a China; el papel, las imprentas, la fotografía, el cine, el teléfono, el foco, el código morse... Todos estos inventos o creaciones fueron importantes y trascendentales para la humanidad... por un tiempo. Casi nadie usa el papel porque ahora todo es digital, y peor ahora con el tema del calentamiento global y la ecología del planeta, donde imprimir una hoja significa matar no-se-cuántos árboles. Por otro lado el código morse se usa aún pero a un nivel muy particular, todos los demás usamos teléfonos para la comunicación cotidiana a distancia. El cine pasó de film a cinta digital... Por más importantes que hayan sido esas creaciones, ya pasaron a mejor vida y el nombre de sus creadores se ha perdido en el olvido. Todo ha sido desplazado por innovaciones y nuevas tecnologías. Pero lo peor es que aquellos hombres que inventaron una mejora para todo lo antiguo no tienen rostro o nombre. Es necesario hacer una investigación exhaustiva para saber cómo se llamaba el hombre que inventó el laser, el inventor de la fibra conocida como polar o de dónde proviene la persona que inventó la cámara digital. Es decir, no solo destronan a los antiguos creadores, sino que dejan la corona tirada en el suelo porque nadie se considera digno de reclamarla o no es solo una persona la que hizo grandes descubrimientos. Todos estos logros son trascendentales, pero no son eternos y, por lo tanto, no son legendarios ni históricos.

Ser un "dios" requiere de mucha inteligencia, creatividad y estudio. Crear algo en la actualidad puede ser fácil, pero es efímero. Lo que yo deseo (y tal vez no sea solamente yo) es crear algo de magnitud cósmica, algo que coloque mi ingenio en la historia para siempre. Así como Isaac Newton es recordado cada vez que se habla de la gravedad, mi nombre se escribirá en la mente de todos los que usaron mi creación para hacerle un bien épico a la humanidad... o una maldad infame al mundo. Por qué no? No solo existieron dioses buenos: Hades, el dios de la muerte o Marte, dios de la guerra, entre muchos otros cuyos nombres o "carteras" no incluían "amor, sabiduría, progreso" o esas cosas. Cada uno de estos dioses era muy bueno en lo suyo, juzgados por sus capacidades y no por sus labores.

Obviamente crear algo para el mal o el perjuicio de la humanidad sería algo estúpido: no tiene sentido inventar algo para destruir a quienes llevarán tu nombre por la eternidad... salvo que esa destrucción asegure la subsistencia de la raza humana... lo cual no convence a nadie.

No tengo ninguna conclusión para todo esto. Es muy ilógico la verdad, pero hay algo de cierto. Aún con todos los impedimentos de la edad moderna, sé que crear algo totalmente nuevo es posible... Y lo creeré hasta el día en que deje este mundo... beneficiándose con mi legado.

PD: No estoy loco, es solo mi alterego que habla idioteces sin mi permiso. No le hagan caso.

lunes, 14 de julio de 2008

Puntos suspensivos...

Últimamente he visto a estos puntos en muchos lugares: comentarios, nicks, subnicks, slogans, citas textuales, cartas, etc, etc. Se están poniendo de moda por una cuestión funcional o por un caso de ociosidad mental personal?

En sus orígenes, los puntos suspensivos servían para indicar que una frase o idea continuaba a pesar de no haberse escrito el resto. Como el nombre dice, te dejan con el suspenso de saber qué pasará más adelante y por lo general te incitaban a seguir leyendo para conocer el final del asunto. Pero los días de trabajo galante y refinado de los puntos suspensivos pasaron a ser historia.

En algún punto del progreso de la humanidad, estos tres tristes tigres comenzaron a saciar otras necesidades de comunicación y expresión inculcando otros sentimientos en los lectores. De mantener el encanto en la lectura, han pasado a ahorrarle el trabajo mental a algunos escritores o meter presión emocional/psicológica en quienes leen sus líneas.

Algunas personas están muy cansadas de explicar todo (como si tuvieran que explicar la fórmula para convertir el plomo en oro 3 veces por semana) así que recurren a los puntos suspensivos para anunciar que les llega olímpicamente escribir la frase completa y terminar una idea. "No entiendo por qué pasó..." Ponen a los tres mosqueteros al final para cubrir el desdén de un escritor casual. De igual manera, otro uso de los puntos suspensivos sirve para dejar caer un gran peso moral/emocional sobre la persona que lee un comentario o sugerencia. Alguien te pide un consejo y le dices "si yo fuera tú, lo pensaría..." Toma mientras! Eso quiso decir "Tienes que darle vueltas al asunto, pero no me voy a tomar la molestia de hacerlo por tí, es tu problema, tu tiempo, tu vida, tú lo resuelves... pero yo ya cumplí". Una vez más, el pobre trío tiene que denigrar su trabajo soportando el peso de la pereza o desinterés de una persona. Por último está la mega función de significar TODO. Así de simple. Tres puntos deben significar todo, y la otra persona debe saber qué suxa es ese "todo" al que se refiere. Le preguntas a alguien qué opina al respecto, y te responde "..." Te fuiste a la shiet. Ahora quién te va a decir qué significan esos tres puntos tirados al abandono?

Sería muy cruel negar que este pequeño grupo de tres aún cumple la función de causar intriga y suspenso, pero esto va más allá de la simple y sana curiosidad de saber qué más hay. Ahora también hay un poco de morbo al implantar la inquietud, como diciendo "tienes que preguntarme el resto, sé que te mueres por saberlo y no lo diré hasta que me lo supliques". Un típico caso es: "Yo solo decía..."

Es una labor dura, vergonzosa, incómoda, morbosa y poco atractiva para ellos, comparado a lo que alguna vez fue, pero alguien tiene que hacerlo.

A estas alturas, creo los pobres puntos suspensivos dirían de sí mismos "ya no aguanto más este trabajo..."

martes, 1 de julio de 2008

Análisis y Síntesis

Hay dos cosas que uno puede hacer cuando se enfrenta a un elemento, situación o sujeto durante la vida diaria: analizar o sintetizar lo que se tiene frente a uno.

En cualquier caso se llega a una conclusión final, una opinión que posiblemente vaya de la mano con la creencia de la "primera impresión". Ya que la primera impresión siempre es importante, algunos lo toman con mucha ligereza mientras que otros consideran necesario notar hasta el mínimo detalle de las cosas. Así como quien intenta culturizar, voy a recordarles que el análisis es el desmantelamiento de la información hasta la última pieza, sin ningún detalle que se escape y todos los aspectos bien cubiertos. Por otra parte, la síntesis es la mutilación de la información hasta la mínima frase necesaria para hacer una referencia "correcta"; incluso con una palabra bastaría.

Bien. En nuestro día-a-día pasamos por varios procesos de análisis y de síntesis, pero algunas personas son más propensas a sintetizar que analizar. Le podemos echar la culpa abiertamente a la sociedad tan acelerada en la que vivimos, pues el análisis implica un buen tiempo pensando y catalogando, y por el contrario la síntesis se encarga de simplificar la explicación y reduce el tiempo que toma llegar a una conclusión... Ideal para un mundo tan apurado.

Desmenusar las cosas puede ser bueno o malo. Los puntos a favor de hacer esto es que puedes ver más allá de lo que otras personas ven y existe la posibilidad de encontrar virtudes invaluables donde otros encuentran defectos repugnantes. El problema está en que ocasionalmente el tiempo invertido en analizar no queda compensado con los resultados obtenidos. Por desgracia vivimos en un mundo lleno de sorpresas desagradables y generalmente uno descubre que perdió su tiempo analizando cosas que no valen la pena, pero a la vez se aferra más a aquello que tiene un valor intrascendental... Son muy pocas cosas, por eso las atesora con más vehemencia.

El antihéroe del análisis es la síntesis. Es una conclusión precipitada que nace en un mísero pensamiento al cual se le dedica no más de 2 segundos (o ya no sería "síntesis"). Aparentemente este método de asimilación es más popular (y posiblemente el más beneficioso) porque la gente no tiene tiempo de observar, les duele parar unos minutos en sus agitadas vidas y ver más allá de lo que muestra una simple cara. Con la síntesis puedes abarcar más rubros en menos tiempo obteniendo casi los mismos resultados que con el análisis, salvo que la síntesis no da lugar a "posibilidades". La ventaja de la síntesis es el ahorro de tiempo y por lo general funciona como defensa para lo desagradable: ¿para qué arriesgarte a analizar algo si a simple vista parece un desperdicio de esfuerzo? Punto en contra para la síntesis es que SIEMPRE omite algún detalle importante o resaltante, a veces vital para un desenlace provechoso.

Dejando la teoría de lado, el análisis y la síntesis forman parte de nuestra vida cotidiana, pero varían mucho de acuerdo a la persona y lo que esté estudiando. Por genética, es muy común que los hombres sean sintéticos y las mujeres analíticas. Una mujer dice "hombres... ¿por qué cuando una espera algo de ellos, simplemente hacen lo contrario?", mientras que un hombre dice "mujeres.... cómo JODEN!". Se nota cuál es la síntesis y cuál es el análisis, cierto?

No hay forma de determinar cuál método es el mejor, cada uno utiliza el que quiere cuando quiere, si se siente de humor o no, si tiene la paciencia para pensar o está en el apuro de elegir rápido. Ambos métodos tienen beneficios y consecuencias, pero lo importante es estar conforme con la decisión elegida y no atormentarse por lo que se deja atrás. Aunque la vida sea una y muy corta, tomarse las cosas con calma ayuda a disfrutar y valorar lo que realmente vale la pena y te permite superar aquello que te causa incomodidad y te entristece.

Por fortuna siempre existen las oportunidades y siempre tenemos la posibilidad de enmendar errores o reformular nuestras ideas. Lo que me hace pensar........... tengo una lista de cosas que me gustaría revisar... solo por si las dudas. Equivocarse es un proceso natural en el desarrollo de las personas, pero admitir el error y esforzarse por corregirlo es algo que pocos tenemos el valor de hacer.... "no hay tiempo" pues.

jueves, 26 de junio de 2008

Torrente de ideas

Llevo casi meses sin agregarle algo a este blog. No significa que lo haya olvidado, es solo que... digamos que estaba esperando que las ideas se acumularan bien para dejarlas salir con mayor fuerza (bonito floro... no me lo creo).

En fin, creo que ya tengo (o "tuve") mucho que decir. Desde el día del padre estuve con varias ideas en la cabeza, tantas que ya no recuerdo muchas de ellas. Y es una pena porque en su momento YO PENSÉ que eran buenas pero tal vez no, por algo se fueron.

He venido solo a mantener este sitio "activo", sin mucho que agregar. Incluso para mí es un poco extraño poner algo tan pequeño comparado con los posts anteriores que son largos o redundantes o muy ilógicos (muy a mi estilo). Posiblemente elegí un mal momento para escribir.... Todo ese torrente de ideas debe haberse desembocado en otro lado. Simplemente no se me ocurre nada.... Qué fea sensación de querer decir/hacer/escribir algo y tener un agujero negro en la cabeza que absorbe las viejas ideas y nuevas ideas. Sientes que algo muy bueno y único se puede haber perdido pero peor aún es pensar que no lo notaste.... Es muy complicado. Me tomaré un break (de nuevo)

domingo, 25 de mayo de 2008

El Defensor de las Causas Perdidas

Martin Luther King, Mahadma Gandhi, el Papa Juan Pablo Segundo, Al Gore... Todos ellos tenían (o tienen) un propósito que defender. Sea una causa justa, una causa noble, o el futuro de la humanidad, ellos pelean por una razón que se justifica a sí misma: la libertad, la vida, la justicia, la igualdad... Causas por las que vale luchar, incluso por las que uno puede sentirse orgulloso de defender y más aún si consigues generar un cambio para el bien.

POR OTRO LADO... existen las causas perdidas, aquello que no se puede defender porque por donde lo mires no tiene salvación. No solo se trata de cosas malas, también hay cosas "buenas" que uno quiere desadmitir, como el carácter de alguien que puede ser muy gracioso y sería ilógico decir que tiene un lado serio... Es una buena persona, y aveces nuestra nobleza nos impulsa a defenderlo... "es nuestro amigo" pues.

El problema comienza cuando uno tiene complejo de defensor del pueblo, o es fanático de dar la contra a todo. Pasas por la calle acompañado por alguien y encuentras basura en el suelo. Sin poder retener la ira, tu compañía dice "esta gente es desconsiderada y cochina, viven como animales!"... Entonces tú, como defensor de todo, dices "pobres, tienen una crianza pésima, además ya es un chiquero, un poco más de basura no hará diferencia".... De lo peor pues. Si son puercos, son puercos. Nadie los hizo así excepto ellos mismos. No tiene sentido defenderlos... una causa perdida.

Te parece un ejemplo muy extremista? Algo por lo que nadie alzaría la voz para defender? Está bien, entonces expongamos un caso más "real". Conoces a una persona que es muy leal, buena gente pero es bieeeen vago, ocioso hasta crear una nueva escala de vagancia. Un día comete un acto de haraganía y toda la gente se le va encima (OBVIAMENTE es más fácil rajar y revolcar a alguien cuando no lo tienes cerca... y más fácil aún de maltratar cuando está a kilómetros de distancia). En tu sentido atrofiado de la justicia sientes que es muy abusivo que 4 o 5 personas se le tiren encima a un indefenso (y desafortunado) ser humano que ni siquiera está ahí presente para aclarar las cosas o exponer su punto. Para saciar tu necesidad de cuestionar lo que la gente dice, pretendes defender al pobre agredido. Y ahora? Por dónde lo defiendes? Es vago, es desganado, poco productivo. Digamos que son puntos en contra que pesan. Pero si piensas en los puntos a favor entonces es buen amigo, buena gente y... y... eh....... Bueno, cruza los dedos para que eso sea suficiente para salvar la reputación de la persona. Mala noticia: no es suficiente.

Lamentablemente pesa más lo negativo que lo positivo en cada persona. Un acto malo te arruina media docena de actos buenos. Citemos algo del ámbito nacional (algo muy delicado por cierto): Fujimori (...odio la política pero es el ejemplo más claro). Nuestro querido chino fue un presidente prometedor durante sus primeros años. Luego vino un pequeño escándalo con un "auto-golpe de estado". Ahí reemplazó a todos los miembros del poder ejecutivo (creo... corríjanme si me pasé de bruto) y puso a varias personas de dudosa capacidad y criterio para sus cargos respectivos, pero luego de esto llegó un tiempo de estabilización financiera desde lo que Alan García nos hizo, también el terrorismo fue controlado masivamente hasta el borde de la extinción. El Perú tuvo varios progresos en diferentes ámbitos, estaba saliendo nuevamente a flote desde muy, muy hondo. Pero quién lo recuerda por eso? Yo les diré por qué se le recuerda más: por "asesino" y corrupto. Mejor dicho, se le recuerda por Vladimiro Montesinos (un maestro, dicho sea de paso, pero por desgracia le dio mal uso a su genialidad). El terrorismo tenía que erradicarse de un modo u otro. Siento un gran pesar por las familias que sufrieron debido a las medidas tomadas como represalia a los ataques terroristas, pero (digo con mucho dolor) ellos ya estaban en medio de una situación muy crítica y tarde o temprano tendrían que sufrir las consecuencias de todo esto. Varias personas inocentes fueron asesinadas por operativos organizados de parte del gobierno... pero el nivel de terrorismo era tan agresivo que tal vez hubieran sufrido el mismo final de un modo u otro (el coche bomba en Tarata por ejemplo?? Es justo para los que sufrieron ahí? No lo creo). Por otra parte, una medida de paz através de la palabra y la paciencia (a lo Gandhi) hubiera dado como resultado la destrucción de nuestro país. Lo que hicieron Fujimori y Montesinos fue cruel y despiadado... Pero al que me salga con una mejor solución a corto plazo para un problema de tal magnitud, lo proclamo nominado a ganar un premio Nobel.... No hay pues. El Perú estaba a pocos pasos de caer en una época oscura de terror extremo. Situaciones drásticas requieren medidas drásticas....

Pero volviendo al tema (vieron cómo los defendí en el párrafo anterior? No puedo con mi genio), nadie recuerda a Fujimori o a Montesinos por el bien que le hicieron al país (el cual fue inmenso) pero sí los recuerdan por el mal que hicieron (los vladivideos, estafas, tráfico de armas (( fuente de dinero )), muerte de varios inocentes que a mi parecer fue un sencillo de lo que pudo haber ocurrido si no se solucionaba el problema). Ahora piensas en ellos y dices que son una porquería, una vergüenza para nuestro país y la historia. Supongamos que intentas defenderlos en un debate político en tu casa. Vas a perder porque por cada crueldad que ellos hicieron, ignoran un montón de beneficios que trajeron a nuestras familias. Y aunque tengas la razón, ellos siguen siendo malos y no darían ni un centavo por su defensa.

Entonces, existen cosas que aunque tengan puntos a favor es bien difícil defenderlas... y existe gente que le gusta encontrar lo bueno en lo imposible. Es una costumbre entre pocas personas nobles (y buenos amigos) defender algo o alguien que no tiene salida. Incluso el otro día un amigo rajaba de alguien que a mí no me cae ni muy bien ni muy mal. Hablaba y hablaba, ladraba cada palabra con tanta furia que sentí el impulso de defender a esta persona. Lo pensé y lo pensé tanto que llegué al punto de decir "sería bueno mantener la boca cerrada... él tiene razón y no tengo nada que abogar"... Pero no... el Defensor de las Causas Perdidas hizo acto de presencia. Abrí el hocicote y solo conseguí redireccionar la ira de mi amigo hacia mí por defender a este "pobre idiota"... Ahora sí es un pobre idiota porque me soplé toda una mentada de madre gratis por defenderlo.......... Ni más con esto...

domingo, 11 de mayo de 2008

Aunque solo es una vez al año...

Escribiré rápido porque no quiero acabar este post luego del día de la madre, así que saldrá un poco a la prepo.

Piensa en una mujer que no tiene idea que existirás, lleva una vida como cualquier otra mujer de 20, 25 o 30 años hasta que un día, por un sueño en la vida o una loca y acalorada noche, formas parte de su futuro. Esta mujer deja de hacer todo lo que solía porque ahora existe otra prioridad en el mundo: tú. Cuando antes no existías para esta mujer, ahora eres lo único que la impulsa a existir, moviendo mar y tierra para ver que aquello que tanto ama sea feliz y nunca le falte algo. Esas son las madres.

Desde el día en el que te das a conocer en el vientre materno, la madre ya piensa en tí y en lo que podrás necesitar: una cama bonita y cómoda, juguetes y ropita apropiada entre otras cosas. Piensa en el nombre, el cual ya habían elegido si es que estaban preparados para esto, o pasan día tras día buscando uno que resalte lo importante y maravilloso que será su nuevo hijo. Durante el colegio tratan de darte todo, te llevan a clases o te suben a una movilidad, te obligan a tomar micro porque ella no puede llevarte ya que está usando ese tiempo para generar ingresos y poder mantenernos. En algunos casos, tremendos viejonazos todos, seguimos pegados a ellas, que nos molestan diariamente para salir del nido y buscar oportunidades. A veces parecen buscar una sinrazón y crearnos problemas, pero es solo un impulso que tienen de querer vernos volar solos. Quién no tiene la típica discusión con la madre donde siempre se suelta un "déjame ser como yo quiero ser!". Como parte de su derecho por ser madres y nuestras creadoras, ellas pueden elegir un futuro para nosotros, pero como suprema libertad que tenemos como seres humanos, nosotros podemos elegir nuestro propio camino. Es acá donde los conflictos comienzan pues una quiere una cosa pero nosotros queremos otra, y encima pensamos que los tiempos han cambiado y ahora todo es más liberal y personal... Bueno, antes no era así, porque antes era mejor todo. El orden y la disciplina impuesta mantenían las cosas bajo control en las épocas antiguas, cuando nuestros padres se conocieron. Es bajo ese estricto régimen que muchos de nosotros tenemos padres dedicados y empeñosos, mientras que otros cuantos desviados no pueden ser usados como buenos ejemplos para este tema... Pero no todo está perdido: incluso los malos ejemplos son usados como buenos ejemplos para lo que no debemos y usualmente no queremos ser.

Aunque el tiempo pase, siempre seremos "los pichones de mamá", aun casados y con hijos, las madres siempre nos verán como las crías que necesitamos de ellas, y ellas harán lo que sea para no dejar de ser madres al punto que les brota inconscientemente. Incluso en su propio día, fieles a la tradición de una comida opulenta con todas las madres en la familia, se paran junto a la mesa y sirven los platos llenos hasta el tope para que sus niños estén bien alimentados y queden satisfechos. Solo se sientan cuando todos los demás ya están listos y atendidos.

Así que recuerden: madre solo hay una (por suerte), porque no existe alguien más que pueda querernos tanto como lo hacen ellas. Y si tu madre se pasa todo el día molestándote y no la soportas, recuerda estas sabias palabras: "Madre que no jode... NO ES MADRE".

Feliz día a todas las mamás.

P.D: Para variar, me distraje y el post lo terminé pasado las 12, ya no es el día de la madre pero la intención cuenta.

domingo, 4 de mayo de 2008

"Ahora los declaro... Marido y Amigo"

"Oye, dónde estás? A qué hora llegas a tu casa? Con quién estás? Vas a tener tiempo ahora o no?" son algunas preguntas entre otras que te haría una mujer... Pero no, estas también las hacen "amigos" sin vida que se te prenden del pescueso como sanguijuelas.

Todo comienza con un error muy común. Conoces a alguien, te parece buena gente o un mate de risa, y como no le ves nada malo, decides hacerte su pata porque les vacilan las mismas cosas o viven cerca... pueden ser varios motivos.... EEERRROR!!! Acá comienza tu cruel destino. Durante los primeros días todo es normal: te pasa la voz para hacer algo y aceptas, le pasas la voz y acepta. Sales a matar el rato, una encerrona en su casa para jugar Nintendo o Playstation, o para los más bravos, se juntan a chupar como vikingos... Como sea, le dices que te acompañe a comprar una pela (obviamente no la ven juntos en la casa de alguien... eso sería muy marisco), van a comer un sanguchón de la tía veneno ahí por el vecindario... etc. Pero eventualmente uno tiene otras cosas que hacer.... UNO, no el otro... el otro te sigue llamando para hacer algo o visitarte o qué sé yo, porque no tiene una vida social variada que lo mantenga distraído. Cree que eres la persona ideal que siempre estará ahí, que lo escuchará y lo aguantará sin importar qué. Entonces llega el lunes o cualquier otro día hábil de la semana, atiendes tus responsabilidades principales (clases, trabajo, etc) y a la mitad de tu jornada te llaman al celular para preguntarte en qué andas, a qué hora acabas o qué planes tienes mañana o pasado... no, corrección: qué planes tienes mañana Y pasado. Sí, ya te separó para toda la semana. Con el transcurrir de los días, tu libertad y tiempo de calma comienzan a verse seriamente comprometidos por la insistente presencia de una persona que poco a poco se torna indeseada... Cualquiera diría que hablo del matrimonio esclavizante o un noviazgo perturbador... Es casi lo mismo, pero sin el anillo... y sin la mujer.

Luego de años de experiencia, he dado con formas de detectar a este tipo de gente que no lo dejan en paz a uno porque se ha vuelto "el amigo inseparable". He aquí simples formas de "tazar" a estos seres humanos:

- Primero fíjese si tiene otros amigos. Una persona buena gente y/o divertida pero que no tiene muchos amigos definitivamente significa algo.

- En caso que la persona tenga amigos, mantenga un ojo abierto en qué tan frecuentemente se junta con ellos. Así se sabrá de qué forma distribuye su tiempo durante el día.

- Revise qué tan activo y animado es cuando está con gente. Generalmente el estádo de ánimo de estas personas es muy alegre y vivaz cuando están en grupo, tratan siempre de resaltar en la manada ya sea haciendo idioteces, hablando incansablemente, llamando la atención con gestos o ademanes exagerados, tratan de pasarse de listos con los demás ofendiéndolos "en broma", o exhibiendo un aire de superioridad que incomoda a todos.

- Analise sus hábitos y gustos: fíjese que le gusten cosas como el futbol, cine, un poco de cultura general y, PRINCIPALMENTE, que le guste salir a divertirse, a discotecas o fiestas... y que no vaya solo, que salga con turbas grandes (más de dos). Que le gusten actividades sociales que involucren a muchas personas.

- Verifique que no cuente con cuentas o saldos de promoción para llamar libremente a cualquier número. De ser así, es posible que se trate de alguien envuelto en la necesidad de llamar a quien sea a cualquier hora en cualquier momento.

- Que no sea un fanático de las noticias irrelevantes frescas. Esta gente tiende a informarse de todo lo irrelevante con tal de tener la primicia de algo siempre.

- Note que no repita el mismo chiste una y otra vez! Básicamente suelen repetir lo que vieron en la tele o escucharon en la radio día tras día tras día. Usualmente son fanáticos de algún programa de televisión o de radio con bloques repetitivos (Especial del Humor, Los Chistosos, etc) y te cuentan lo que vieron o escucharon la última vez. Tambien tienen la costumbre de contar con lujo de detalle creyendo que sería igual que ver u oir el chiste tú mismo.

- Por último, fíjese en lo que la persona hace durante sus ratos libres. Si lo ven matando el tiempo en el parque, o metido en una bodega o cabina, si está en la cafetería del instituto o universidad viendo a la gente pasar ya pueden estimar que tiene serios problemas de vínculo social. Conserve su distancia.

De haber sabido esto en su debido momento, me hubiera evitado todas las penurias por las que estoy pasando ahora. Un "amigo" me llama al celular y evito contestar porque ya no sé qué excusa dar para sacármelo de encima. Como no contesto, llama a la casa. Tampoco contesto, y suena el celular de nuevo. Intercala los teléfonos para asegurarse que conteste. Aveces deja timbrando todo el tiempo hasta que la línea misma le dice "ya, cánsate" y le corta la señal, todo para que lo intente de nuevo. Le digo "llámame en un rato" dando a enteder que me llame en media hora mínimo, pero llama a los 5 minutos: "ya?" - "no pues, en un rato que estoy ocupado" - "qué estás haciendo?" - "cosas! hago cosas! yo te llamo luego" - "ya ya... chau".... Si fallas en llamar dentro de los próximos 10 segundos, ya está marcando de nuevo: "oye, qué pasó? por qué no llamas... no te hagas pues". Ha llegado a tal extremo de "amistad" y descaro que ahora no deja que lo mande a rodar, simplemente se invita solo, nada más llama para avisar que ya viene a mi casa, o que mañana me espera porque se ha comprado un juego nuevo. En mi casa ya no lo aguantan, parece que en la suya tampoco y por eso es que quiere venir tanto. Miles de veces me dice para ir a visitarlo, pero soy un poco hermitaño y aunque viva a cuadra y media, me da pereza caminar hasta allá.

En fin, tantos años en esto también me ha dado la experiencia para hacer una lista de las formas que uno tiene para quitarse a esta gente de encima:

- Cuando te llaman por teléfono, te agarran desprevenido. Es difícil inventar una excusa en pocos segundos, bajo presión. Para darte tiempo, les dices que estás muy ocupado y que vuelvan a llamar en 5 minutos. De este modo puedes pensar con calma en alguna salida (que no hayas usado antes).

- Si te llaman y estás en clases, les das su respectiva mentada de madre porque no debió llamar en ese momento. Y si se quiere poner listo diciéndote "y por qué no apagas tu celular entonces?", simplemente le dices "porque en cualquier momento puede surgir una emergencia y no puedo estar incomunicado". Punto.

- Con la familia o la enamorada: si te llama mientras estás con ellos, sin miedo le dices que se vaya a recoger fruta o a contar césped. El tiempo con la familia y la enamorada es SAGRADO (bueno, eso es lo que debes hacerle creer al acosador para que no te llame cuando estés con uno u otro).

- Si te quieren visitar, puedes usar a algún familiar con quien convivas como aliado. Le dices que atienda y que le diga que no estás... Trata de evitar salir de tu casa en los próximos 20 o 30 minutos... Es posible que la persona esté por ahí viendo si realmente estás en casa o no... total, no tiene nada mejor que hacer que quedarse ahí a esperar.

- Si aún vives con tu madre (como en mi caso), puedes usarla como excusa para espantarlo si es que no pudiste evitar que entren a tu casa. Le dices que es una persona que quiere descanso o privacidad. En caso que trabaje, dices que llega cansada y quiere paz así que nadie puede quedarse luego de determinada hora. Si el "amigo" cree que le estás mintiendo para botarlo, le dices que tu madre se puede poner de un humor horrible si no se le hace caso. En general puedes inventar cualquier excusa pero lo importante es que dejes en claro que te preocupa que tu madre se sienta bien, cómoda y tranquila. La mayoría de personas respetan a cualquier madre y sus decisiones o necesidades/exigencias.

- Por último, sin mucho resentimiento, le puedes decir que ya no tienes tanto tiempo libre como antes y que te llame fines de semana (si quieres) o le prometes llamarlo al menos una vez por semana (que de hecho sería bueno que cumplieras) hasta que poco a poco le entre el mensaje y se olvide de acecharte.

Para terminar... Este tipo de cosas solo suceden si tienes una vida social muuuy inactiva y hermitaña, como la mía, que pasas prácticamente todo el tiempo metido en casa (sí "trabajo", soy freelancer... no hay necesidad de salir mucho para esto). Como no haces nada, todos creen que te sobra el tiempo, pero comienzan a desconsiderar tu espacio. Y como estás libre casi siempre, es difícil decir que "no" sin una razón (aparte de "no querer" simplemente).

Por qué tuvo que pasarme esto con un amigo... y no con una mujer? No es que sea bueno que una mujer, o una persona del género opuesto en todo caso, te acose a diario y quiera saber todo lo que haces... Pero definitivamente es mucho mejor. Y lo peor es que no hay un divorcio para alejarte de ellos.

Creo que ya sé cómo me desharé de este amigo........... Rayos, matar está penado por la ley.

jueves, 1 de mayo de 2008

I'm no Hero

Bueno, odio los comienzos de cada post. Nunca tuve cerebro para pensar uno así que me iré directo al tema esta vez.

Si nos preguntamos por qué hacemos las cosas, hay varias posibilidades. Entre ellas está "la búsqueda de la felicidad", o "cumplimos con nuestro propósito en la vida" (el cual nadie sabe qué suxa es) o pavadas más sencillas como "hago las cosas porque quiero y soy bravo, vivo para esto!"

En mi humilde parecer, todos tenemos un perfil de héroe o villano que llenar. Ninguno de los dos es bueno o malo respectivamente, cada uno tiene sus pros y sus contras que dependen enteramente de cómo desarrolles las cosas. Personalmente siento que tengo el perfil de héroe. Un día soy Superman: vuelo por ahí revisando que nadie esté en problemas, y si se aparece alguien, voy lo más rápido que puedo a ayudarlo, luego me quedo dando vueltas alrededor perdiendo un poco mi tiempo intentando desarrollar un vínculo más profundo, ya que mi labor de héroe me dificulta el hecho de pasar tiempo con mis amistades. En otras ocaciones no puedo ni quedarme un segundo más porque otra persona necesita de mi ayuda. A veces desearía ser un supervillano y no pensar en nadie más, solo en mí por encima del resto del mundo... pero mi naturaleza me impulsa a velar por el bienestar de la gente.

Por ratos soy Batman: dando la cara a la luz del día cuando hay responsabilidades inevitables que atender, poniendo una sonrisa de oreja a oreja escondiendo lo que realmente pasa por mi cabeza. Pero cuando nadie me ve, trato de alejarme de la gente, no existo para muchos y la única forma de obtener mi ayuda es através de una señal la cual es casi siempre obvia: "Tony, necesito que me ayudes". Nadie me dirige la palabra para otra cosa excepto para pedirme algo. Como es mi deber y creo ser el único capaz de resolver el problema, es imposible para mí ignorar el llamado de auxilio.

A veces siento que soy Flash: nada muy elaborado, simplemente un pobre loco que corre de un lado a otro, tratando de hacer todo lo que puede con el pensamiento optimista creyendo que logrará completar cada una de sus tareas sin fallar... tal vez sin pensar en el bienestar personal, aunque asumir un reto tan desafiante puede ser muy divertido. Cabe resaltar que ninguna de las actividades múltiples incluye una que genere un beneficio directo para mí.

Puedo ser Spiderman: tengo habilidades y siento que debo hacer un bien con ellas; le doy prioridad a las necesidades de la gente antes que a las mías, lo cual me perjudica en cuanto a compromisos, labores, responsabilidades, etc, y cuando finalmente decido dedicarme a lo mío, mi impulso de usar mis capacidades para el bien ajeno vence mi autoconvicción de olvidarme del resto y de nuevo regreso a salvar a quien me necesite.

Lo triste en todo esto es que a diferencia de los superhéroes conocidos que usan máscaras o adornos en la cabeza, o incluso el cortecito de pelo de Superman que tiene el superpoder de hacerlo super diferente a como se ve normalmente y los lentes de Clark Kent que disminuyen el coeficiente intelectual de quienes lo miran (por Dios, yo veo a Clark y de inmediato saco que es Superman así se ponga 3 pares de lentes encima y se acomode el rulo que le cuelga por la frente)... Yo no uso máscara. Todos saben quién soy y quién los ayuda, pero aún así los siento muy distantes. La gente sabe que no pueden vivir sin Batman, o sin un Linterna Verde, les deben la vida incontables veces... pero alguien les invita un almuerzo? o les deja un regalo de agradecimiento en un techo o un árbol o lo que sea? Nadie lo hace! Tal vez pensarán que el héroe está ocupado y no tendría tiempo de atender a un ciudadano común y corriente... excusas que usan para evitarse la molestia. Pero es falso, todos los superhéroes, aunque duros y decididos, tienen un "ciudadano común y corriente" al cual desean acercarse con tanta vehemencia. Superman tiene a Luisa (o Louise), mujer a la que amará por siempre. Batman evita contactos pero se sabe que su único y verdadero amor fue Gatubela (Catwoman) aunque le causara tantos problemas. Flash no tenía interés por una persona, por el contrario, él tenía interés por todos, quería ser famoso y reconocido.

Escuchar un "gracias" de personas que has ayudado puede ser gratificante o satisfactorio, aunque con el tiempo se devalúa. Pero oir un "gracias" de aquella persona que signfica tanto para uno es lo que nos mantiene en el negocio, esperando que el destino nos lleve nuevamente a sus brazos pidiendo auxilio, hasta que tarde o temprano ese pedido de ayuda sea una excusa tan solo para estar cerca a nosotros....

Durante años, ese día nunca llegó para mí. Hay varias personas que han significado mucho, a las que he ayudado tantas veces que su agradecimiento ha dejado de tener significado... y por eso es que decidí ya no ser un héroe. Hacer estas cosas nos ayudan a mantenernos vivos, pero no siempre es suficiente. No encontré el amor de mi vida, ya sea porque nunca tuvimos el valor de decirnos lo que sentíamos o porque nunca existió; tampoco encontré la fama ni la gloria, y el recuerdo que todos tienen de mí es qué tan gracioso puedo ser o qué tan capaz soy de resolver un problema... ellos saben que siempre estaré ahí cuando griten mi nombre en el cielo. Pero si me he tomado tantas molestias para ser el héroe que todos desean tener cerca porque recuerdan las cosas que hace pero no por la persona que es, entonces es hora de dejar este trabajo y ser una persona normal. Aún estoy ahí para quienes valen mucho, pocas personas que demuestran gratitud y aprecio, tal vez no tanto como uno desearía... pero la esperanza es lo último que se pierde. Quién sabe, algún día pediré ayuda y puede que venga una superheroína a socorrerme y en ella encuentre todo lo que he estado buscando por tanto tiempo. Ya es momento de colgar la capa y dedicarme a mí, porque hay mucho tiempo perdido que me caería bien recuperar.

lunes, 28 de abril de 2008

A los 40 nos llevaremos bien

Todos los que tenemos hermanos, preferiblemente uno no má', pasamos por la agitadora experiencia de discutir con ellos ya sea porque alguien se terminó la leche o porque el otro dejó el caño abierto, no avisaron que había llamado una persona importante o porque tomó algo sin permiso.

Hoy, para variar, discutí con mi hermano. El tema de la "conversación" sieeeempre es el mismo: "por qué tú sí, y por qué yo no", "vivimos en la misma casa", "yo respeto tus cosas, respeta las mías" entre otros. Obviamente en base a esos argumentos comienzan los ataques bravos, posturas defensivas, arrebatos agresivos, palabras de desprecio, una que otra frase dicha sin pensar solo para liberar el alma del estrés que genera el ambiente (y tratar de herir al otro en un órgano vital para inclinar la balanza a tu favor). Y es muy común encontrarse a uno mismo renegando de lo mismo que la vez anterior... y la anterior a esa... y la anterior a la anterior a esa... y así sucesivamente, un tema que fundó la base sólida de la pelea para futuras generaciones de pleitos.

Pero pelear por lo mismo tiene sus puntos a favor, especialmente cuando nadie en casa entiende lo que tratas de expresar por falta de claridad o por excesiva negación de parte de los demás. Si discutes mucho sobre un mismo tema (y no lo haces solo para producir bilis), tienes la oportunidad de pensar en lo que se dijo para ver por dónde puedes encontrar una falla en la mentalidad del otro o para asegurarte que defender tu postura no será un intento en vano.

Desde tiempos inmemorables, las peleas en esta casa comienzan con un roce entre mi hermano y yo. Aunque muy modestamente admito que nunca he corrido hacia mi madre o padre para que me den su apoyo, de algún modo ellos dos terminan involucrados en el asunto... tal vez gritar como histéricos para que el mensaje se quede grabado en el cerebro del otro haya llamado su atención.... no lo sé. El rol de los padres implica traer paz al hogar y evitar discusiones repetitivas especialmente cuando el detonante fue algo muy simple (pero que años atrás fue la gota que derramó el vaso). Con un buen "ajo!" y "son hermanos, no peleen!" se le puso punto final al asunto... pero la hoja aún tiene muchos renglones para continuar... y la gente aún tiene energías para seguir. Con el tiempo, las discusiones se vuelven pan de cada día para quienes son "víctimas" de lo ocurrido, pero es aquí cuando los padres se cansan de ser padres y se convierten en personas "X" que no tienen nada que ver con la discusión y cuando acudes a ellos para buscar poder de persuasión a tu favor para terminar rápidamente con el conflicto, te contestan "es su problema, arréglenlo ustedes".

De aquí en adelante, los enfrentamientos no cesarán y la duración de cada pelea solo dependerá de qué tan dispuestas estén las personas a concluir el intercambio "poco familiar" de palabras. Hoy en día siguen habiendo problemas con mi hermano. Los miembros de mi familia son un poco "independientes", cada uno por su lado a ver lo que encuentra y luego a rendir cuentas en la casa. Cada uno es víctima del cruel destino y de las dificultades que le impone la vida al verse forzado a subsistir de sus propias ideas y necesidades... cosa que cuando llegan a la casa y algo está mal, es culpa del otro "por no hacer lo que debía hacer"... o por hacer lo que no debió.

Pero luego de décadas de pelear por lo mismo con las mismas personas, ambos bandos comienzan a dar su brazo a torcer. Antes peleaba con mi hermano y terminábamos molestos, no nos hablábamos. Luego mi hermano desarrolló una conducta un poco descarada: discutíamos, se iba a sus clases o a hacer sus cosas, y cuando volvía se portaba como si nada, pero el que quedaba peor en una discusión era yo y trataba de portarme como si hubiera quedado seriamente afectado. La técnica de mi hermano se fue perfeccionando hasta que comenzó a portarse como si nada hubiera pasado hace 10 minutos... muchos creerían que actúa así debido a una enfermedad mental llamada esquizofrenia. Loco o no, se rompía el hielo rápidamente y nuestras vidas volvían a ser las mismas... por las próximas 5 horas. Algunas peleas se podían extender por largos periodos de tiempo debido al tema tan delicado que se manejaba... y si a esto le agregamos una madre histérica con varias comlpicaciones en el trabajo y el riesgo de perderlo, es natural esperar un campo de batalla con las granadas y todo, sin ninguna trinchera en dónde meter la cabeza... porque aquí alguien saldrá inevitablemente decapitado.

Poco a poco nuestras discusiones duraban más pero terminaban en mejores términos; él entendía lo que yo quería decir, y yo entendía lo que él esperaba de mí. La falsa sensación de bienestar no aseguraba que dejáramos de pelear. Las peleas siguen y siguen, pero poco a poco vas resolviendo problemas, uno por uno, desde los más insignificantes hasta los más trascendentales. Y así será siempre, aprendemos a soportar los defectos y el carácter del otro, superamos lo que nos molestaba ya que el otro superó también lo que le molestaba de uno, algo así como un trueque de resentimientos, hasta que finalmente no hay nada que nos moleste o se interponga para poder llevar una vida tranquila como familia o hermanos...

Pero siendo realistas, hay tantas cosas por las cuales discutimos que sería difícil resolver todas en poco tiempo. Llevamos un buen ritmo, discutimos por temas viejos pero rápidamente los superamos porque ya se han resuelto. Incluso hoy luego de otra pelea, mi hermano me tomó por sorpresa, me abrazó y dijo "no tenemos que pelear... aunque discutamos tanto, somos hermanos y al final lo que importa es que un día te necesitaré y tú me necesitarás, y tenemos que estar unidos para eso". Aunque haya demorado unas 3 horas en escribir esto luego de la discusión, sigo congelado en mi sitio intentando asimilar ese abrazo, a qué se debió, y si esa fue una buena señal para la solución de todos nuestros problemas y pleitos en un futuro porvenir...

domingo, 27 de abril de 2008

No lo hago por tí... hazlo por mí...

Un día estás en tu casa, tu enamorada (o enamorado) se pidió el día libre porque quería ver a un familiar o alguna otra persona relevante que obviamente no comparta el mismo tipo de cariño que uno le da. De todos modos tiene una excusa para no pasar el día contigo. En fin, estás matando el rato cuando de repente una persona del género opuesto te hace una propuesta... y quién sabe, tal vez sea una propuesta un poco comprometedora. Lo que uno usualmente diría es: "Lo siento, no puedo aceptar... ya estoy con alguien y no quiero hacerle eso porque a mí no me gustaría que me hicieran lo mismo".

Esto no solo pasa con las parejas, puede pasar en cualquier rubro, pero el compromiso que genera querer a alguien te hace pensar en las cosas que no debes hacerle porque te pones en su lugar y sientes que sería feo que te hicieran eso. Y es aquí donde inicia el tema de este post. Muchas veces nosotros nos enfrentamos a decisiones simples pero de consecuencias catastróficas si no se piensa con calma en la respuesta o la opción que uno elegirá. Salir con un viejo amigo, comer un helado con una amiga... todas estas situaciones son tan simples que decir "sí o "no"debería demorar máximo 2 segundos en pensar... Pero la torta cambia de sabor cuando tenemos que pensar en alguien más, alguien de quien esperamos y no esperamos cosas.

Salir con un amigo es inofensivo, es solo un amigo. Pero qué sucedería si tu pareja sale con un amigo(a)? Tal vez te pongas celoso(a), tal vez pienses que pueda pasar algo más... tal vez piensas que no te gustaría que te hicieran lo mismo. Debido a eso, simplemente decides rechazarle la invitación a un amigo... un amigo! Nada de qué preocuparse... Pero para muchos, la amistad entre hombres y mujeres no existe. No puedes correr el riesgo de ver cómo tu pareja sale con alguien porque por ahí se puede cocinar algo a tus espaldas. Y como por arte de magia, crees en el balance kármico y decides no salir con tu amiga, porque no te gustaría que tu pareja saliera con alguien.

Debido a este y muchos otros miedos, optamos por no hacer las cosas. No humillarías a alguien porque no te gustaría que te hicieran lo mismo. No ignorarías a alguien porque no te gustaría estar en su lugar. Nos esforzamos tanto por NO hacer lo que no nos gustaría que nos hagan... Pero dónde queda lo que queremos que hagan por nosotros? A cuántas personas has escuchado decir "le daré una segunda oportunidad porque me gustaría que hicieran lo mismo por mí". Errar es humano, pero no perdonar es negar la humanidad que todos tenemos dentro. Tarde o temprano todos cometeremos un error por el cual queremos una nueva oportunidad.

Es imposible vivir sin meter la pata. Ahora imaginen qué difícil sería vivir sin poder perdonar o ser perdonado.... A quién no le gustaría que le den otra oportunidad si comete un error? La vida está llena de segundas oportunidades porque nadie es perfecto al primer intento. Pero retomando el ejemplo citado al principio de este relato, supongamos que aceptas salir con tu amiga y la decisión resultó ser una muy equivocada. Peleas con tu pareja por un tiempo prolongado y terminan por separarse. El sentimiento de culpa te agobvia, deseas pedir perdón por lo sucedido... pero lo que escuchas es un rotundo "NO!"

Echado en tu cama, mirando al techo pensando en todo aquello que ni se te ocurría cuando estuviste con esa persona que te trajo tantas alegrías, un deseo cruza por tu mente: "por qué no me da otra oportunidad? yo le daría una segunda oportunidad si ella me hubiera hecho lo mismo...."

Por qué es más fácil NO hacer las cosas que no nos gustaría que nos hagan? Cuál es el miedo de hacer lo que nos gustaría que alguien más haga por nosotros?

Muchos dicen "no lo hagas por los demás, hazlo por tí mismo"... Pero si las cosas fueran así, para qué querer a alguien más? para qué compartir tu tiempo, tus sueños, tus metas... tu vida con otra persona? Necesitamos a alguien más, y del mismo modo necesitamos que los demás hagan cosas por nosotros, para nosotros. Todo lo que haces se te regresa, y mientras más demore en regresar, más grande será el beneficio. Pero mientras tanto, haz por otros lo que te gustaría que otros hagan por tí, pero no presiones tus propios límites. Al fin y al cabo, la persona más importante dentro de todo esto sigue siendo uno mismo.

jueves, 17 de abril de 2008

Al final la familia siempre estará unida

Mañana es mi graduación. Como tal, es un evento que requiere de mucha coordinación, preparación y organización. Hacer una ceremonia de graduación demora un poco de tiempo porque tienes que ver dónde será, para cuántos será, cuánto va a demorar, etc, etc.... Es algo así como un matrimonio, salvo que acá tú no escojes a cuántos vas a invitar. La cantidad de personas que puedes llevar para que vean cómo terminas una gran etapa en tu vida está fuera de tus decisiones, y es aquí donde comienzas a preocuparte por el compromiso a todos y cada uno de los seres humanos que estuvieron contigo a lo largo de tu carrera (pero que obviamente no estudiaron contigo).

Tienes 5 entradas para repartir. Antes que cualquier persona está la familia. Por tradición es IMPERATIVO que invites a tus padres y a tus hermanos. Ok, una familia tradicional tiene 2 padres y 2 hijos (uno de ellos eres tú, para los torrejas que no la captaron), es decir que estás invitando a 3 personas... Si tus abuelos están en disposición de ir (y aún tienes a ambos junto a tí) 'tons los llevas contigo y gastas todos tus pases sin compromisos ni nada. En caso contrario, aún te quedan 2 pases. El problema es "¿a quién invito ahora para que los demás no se piquen?". En verdad importa un comino si los demás se pican o no, pero se trata de la "familia" y siempre hay que buscar la forma de complacer a todos o por último evitar resentimientos... Podrá ser tu familia, pero nunca sabes cuándo y cómo reaccionarán si los excluyes de algo tan importante como una graduación. En fin, volviendo al tema, toda familia de mi generación debe tener por lo menos 2 tíos. Como son FAMILIA, automáticamente pasan a ser la siguiente prioridad para las invitciones. Y si tus tíos te llegan olímpicamente al tu-ya-sabes-dónde, igual tienes que pensar en tus padrinos, así que juiste, aunque usualmente los tíos y los padrinos son las mismas personas. De todos modos debes elegir a cuál de ellos invitarás. Bajo circunstancias "favorables", cada tío o padrino está casado y/o con hijos, así que el vínculo que los une hace resonar en tu mente la frase de los 3 mosqueteros: "uno para todos, y todos para uno". Si invitas a uno, es muy probable que ellos esperen poder llevar a su familia... pero no tienes 5 o 10 entradas... solo te quedan DOS, así que para evitarte la incómoda situación de tener que decirles "lo siento, pero solo tú puedes ir, los demás no", te buscas al grupo con menos miembros... de preferencia 2, cosa que la cantidad de entradas encaja y listo, eres feliz.... Pero si la vida fuera así de simple, todos envejeceríamos antes... pero este es tema para otro post.

Entonces, descartas a los tíos con hijos y buscas a otros familiares, algún tío soltero, o una pareja donde el esposo o la esposa esté de viaje... Te encuentras en la encrucijada máxima de ver a quién podrás invitar, porque a todo esto se le agrega el hecho que posiblemente nadie haya hecho algo trascendental por tí, tornando más difícil la elección, pero a la vez son tu familia y nunca te abandonarán. Todos tus familiares alcanzan el mismo nivel y te da igual llevar a cualquiera o ninguno. Con mucha inocencia corres hacia tus padres o hermanos y les preguntas "si esta fuera tu graduación... ¿a quiénes invitarías?", todo para que te contesten "a toda la familia si pudiera". Pero como ya vimos infinitas veces que nooo se puede llevar mas que a 2 personas más, comienzas a meter presión y revisar los hechos de cada individuo que comparta rasgos sanguíneos contigo para ver quién es digno de ser invitado: está el tío que siempre va a tu casa; el tío que te da propinas cuando lo visitas; o el que siempre habla con tus padres y pregunta por tí; también está el que se preocupó por darte un consejo cada vez que pudiera (aunque no lo necesitaras); o el tío vacilón que no falta a ninguna de las chupetas familiares (por tí). Del mismo modo están los padrinos: el de bautizo, confirmación, de la primera bomba, padrino del hermano, etc... etc.... etc.... Todos merecen ir, pero no puedes invitar a ninguno sin que esté ligado a otros 50 candidatos potenciales para el evento.

Ya si queremos agregarle un poco de salsa a todo esto, piensa que la graduación será en dos días luego de saber a cuántas personas puedes invitar. Tienes menos 40 horas para elegir e informar a tus invitados y ver si están disponibles para la fecha. Al final de cuentas, no sabes qué hacer con los pases restantes y comienzas a divagar, pensando que sería mejor llevar amigos con los que estudiaste pero no acabaron contigo, o amigos del colegio o gente del barrio.... Se te acaban las opciones al igual que la cordura y comienzas a pensar: "para la próxima, que lo hagan en el estadio Monumental".

Es aquí cuando recuperas la consciencia y recuerdas que no habrá "próxima" y por eso mismo sería genial que fuera toda tu familia...... Mira, olvídate de la familia. No llevas a tus papás ni a tus hermanos si quieres, lleva amigos defrente, a quienes quieras, pero es indispensable que vayan los parientes más chismosos para que le cuenten a todos los demás no-invitados lo que ocurrió y así creerán que no se perdieron de nada. Y si te dicen que no es lo mismo verlo que contarlo, lleva tu cámara con 250gb de espacio para que tomes tantas fotos que parecerá una película cuadro por cuadro. Ya si se quejan que también hay que escuchar, les dices que por ser así de cargosos fue que no los invitaste y al diablo el compromiso familiar.

miércoles, 16 de abril de 2008

"Knock Knock"?!?!

En tiempos inmemorables la gente vivía en cuevas o formaciones rocosas a las cuales llamaban "hogar". Estos hogares tenían un defecto... No tenían puerta. Si bien una cueva era un sitio seguro que podía albergar a uno o más habitantes, la amenaza de animales salvajes (osos, tigres, etc) y los climas inclementes eran un gran peligro para un refugio con la entrada eternamente abierta. Con el pasar del tiempo, las cuevas fueron desplazadas por la creación de casas. Es aquí cuando aparece la implementación de las puertas, aunque en muchos casos eran hojas o pieles colgando de las entradas para impedir el ingreso de aires fríos o incluso de bestias. Más adelante se formaron grupos grandes de personas, la conciencia humana se fue desarrollando más, sentimientos como la envidia y el odio fueron cultivándose y finalmente apareció uno de los crímenes más viejos de la historia: el robo. Para evitar que te calatearan la casa de pura envidia u odio, era necesario poner puertas que representaran cierto nivel de dificultad para abrirlas (wow, qué difícil era empujar una hoja para entrar a una casa... nah, cambio de planes) Aquí nacen las puertas con algún tipo de traba o cerradura.... Y así comienza una nueva era de hogares y puertas.....

Pues te cuento que la historia te engaña. Dicen que las casas y todo lo demás eran creaciones del hombre para poder vivir mejor y más seguros, para poder resistir el clima, proteger sus bienes, etc, etc... Te informo que todo es mentira. En la época de las cavernas, la gente no tenía puertas. Cualquiera que pasaba por ahí se podía meter a la cueva o se ganaba con todo lo que pasaba adentro. Dada la falta de facilidades para colocar bisagras en la rocas, y obviamente la carencia de tecnología para crearlas, las cuevas fueron rápidamente desplazadas por el desarrollo de algo más moldeable al gusto del inquilino: las casas hechas a mano. La gente construía sus casas con troncos y hojas, y de esa forma podían elegir dónde poner la puerta (sí claro, como si eso fuera a ayudar). La vaina era si construías un baño. Ponías la puerta al lado opuesto y ya nadie te veía "hacer de las tuyas". Pues no, era la misma cosa; cualquiera pasaba y podía sapear todo lo que había adentro, incluyendo personas bajando de peso. Para evitar esto, colgaban hojas en las puertas, o pieles o lo que fuera, así los transeúntes pasarían pero no verían lo que hay dentro... aunque esto trajo una gran desventaja. Al no ver lo que hay dentro, no puedes saber si un lugar está vacío u ocupado, y como la gente es media idiota (algo que no ha cambiado con todos estos años de "progreso evolutivo"), todos se metían sin preguntar primero si había alguien. Como la estupidez humana es imparable a través de métodos intangibles, era necesario crear algo que estuviera siempre cerrado: a esto se le conoce como la puerta tradicional que usamos hoy en día.

Miles de miles de años después, estas puertas, con todo y cerraduras de alta tecnología, siguen siendo inútiles. La brutalidad del ser humano no conoce límites. ¿Para qué pones una puerta en el baño si siempre habrá alguien que se meta corriendo sin tocar, como si se estuviera escondiendo de Freddy Kreuger? Nótese que mientras más apurada está la persona, más se adentra en el baño antes de notar que ESTÁ OCUPADO... Pero ¿cómo evitas esto? No creo que la solución sea poniendo 2 o 3 puertas para el baño, como que la primera puerta te avisa que alguien se está metiendo y te da tiempo de gritar "awanta! me'toy echando un carranza!" antes que abran la última puerta y te agarren infraganti con los pantalones abajo. Tampoco creo que poner puertas de acero o titanio ayude en algo. La idea de hacerlas de madera es que sean fáciles de TOCAR para que la persona al otro lado sepa que existe la intención de entrar. Y aunque hagan puertas de acero galvanizado, siempre habrá un desgraciado que, en el apuro, encuentre la forma de abrirla sin preguntar...

A final de cuentas, la mejor oportunidad para tener una larga e ininterrumpida conversación con el presidente es anunciar tu entrada al baño cerrando la puerta con fuerza, para que todos en casa sepan que ya tomaste tu posición en el trono. Otro modo es ver qué hacen los demás miembros del hogar, monitorear sus actividades para saber si estarán ocupados como para no usar el baño en los próximos 15 minutos. Por último, te queda la oportunidad de entrar cuando estés solo, totalmente seguro que nadie interferirá con un proceso inevitable de la digestión.

Y si tienes dos o más baños en casa y creíste que esto te iba a salvar... pues no te ilusiones; siempre tratarán de entrar primero al baño que estás usando aunque la puerta esté cerrada y se pueda ver la luz filtrándose por las ranuras del marco, como si los demás baños carecieran de eficiencia porque están vacíos o lejos. No importa lo que hagas, igual estás cag---

martes, 15 de abril de 2008

Gravedad Cero

¿Quién no ha visto una película con un amigo(a) y ha entrado en debate por un escena tan irrelevante que ni dura más de 30 segundos, pero el debate se extiende por horas? ¿A nadie? Pues a mí sí, y me ocurre frecuentemente. Básicamente sucede porque soy muy terco, y donde yo digo "esto no es así", pues no es así... A MEEENOS que me demuestren lo contrario con pruebas concretas aprobadas por la ciencia y uno que otro famoso en tele por cable. Luego de eso viene la dolorosa aceptación de la equivocación, un proceso por el que muy pocos tenemos el valor de atravezar. "Equivocarse" es como perder, a nadie le gusta perder, especialmente en algo que defiende a capa y espada. Pero... ¿quién defiende algo que está mal o es vagamente conocido por uno mismo? Solo yo!

La hora: 8 y algo - El lugar: mi cuarto... y el cuarto de un amigo, cada uno viendo la misma película desde nuestras casas (sí, así es... para los que ya adivinaron, el debate fue por MSN... más complicado todavía) - La película: Superman Returns - La escena: Casi al inicio, un avión es impulsado hacia el espacio por una nave espacial anclada al avión. Superman separa la nave del avión y este último entra en un punto de "velocidad muerta" y se produce el efecto de "gravedad cero" (o Zero-G para los alineados). El debate inició oficialmente con una brutalidad de mi parte, la cual recuerdo claramente. Y dice así:

Tony dice: "qué maleado, casi se salen de órbita"
Enzo dice: "qué? lo dices por la falta de gravedad?"
Tony dice: "claro, viste cómo flotaron?"
Enzo dice: "no es por la falta de gravedad de la tierra, es un efecto físico que sucede cuando subes a toda velocidad y en el momento de empezar bajada, la gravedad se convierte en cero"
Tony dice (antención a la burrada): "de qué hablas?? la gravedad cero ocurre cuando el avión está bajando, porque el avión cae un poco más rápido que uno por el peso, y como la persona pesa menos, se queda 'flotando' dentro del avión"

Bueno, analicemos mi comentario.

En primer lugar, el peso no tiene nada que ver con la velocidad de caída. Dos objetos liberados a la misma velocidad desde el mismo punto caerán al mismo tiempo... Todo claro? Es fácil. Agarra un limón y una pera, déjalos caer desde la misma altura, y verás que caerán al mismo tiempo... o casi casi al mismo tiempo porque el aire ofrece resistencia para los objetos, etc, etc. Y no te hagas el vivo pensando que si tiras una manzana en lugar de una pera harás que el experimento sea diferente. No, es la misma vaina limón, pera, manzana, plátano, "sandía", melón... tu perro o lo que encuentres (no vale papel, ese cae haciendo piruetas por la forma que tiene; si quieres usar papel, hazlo bolita primero, bien apretada). Ok, sigamos...

En segundo lugar, si el avión es tan pesado como para caer antes que una persona, la persona no flotaría adentro, en lugar de eso, se quedaría estampada en la parte de atrás porque el avión lo "empuja" hacia abajo. No se me ocurren experimentos para esto, le preguntaré a una amiga que trabaja en Mad Science a ver qué roca se puede hacer para probar esta teoría.

Por último, si el avión se alejó tanto de la tierra como para llegar a gravedad cero en el espacio, entonces el avión habría seguido su trayectora hacia el espacio sideral en lugar de volver a caer hacia la Tierra.

Habiendo aclarado le vasta brutalidad de mi comentario, es hora de culturizar a la gente:

La gravedad cero (Zero-G para los que no me entiendan) en la Tierra ocurre cuando un objeto sube a una determinada velocidad hasta hacierto punto. En ese punto, el objeto alcanza la altura límite producida por la velocidad y ya no sube más; en vez de eso, queda suspendido en el aire por unos segundos antes que la fuerza gravitacional de la Tierra haga de las suyas. En ese tiempo de suspención, la fuerza de empuje mantiene las cosas "a flote" dentro de una gravedad anulada, osea, gravedad 0. En buen cristiano, aquellos que han saltado en saltarín o cangurín o cama elástica... recuerdan que cuando saltaban y llegaban al tope del salto, las cosas que tenían con ustedes (collares, polones amarrados a la cintura, el mismo pelo, etc, etc) parecían flotar al mismo nivel que ustedes en el pico más alto del salto? Eso, señoras y señores, es una muestra asquerosa e imperceptiblemente breve de lo que es la gravedad cero. Lamentablemente pasamos demasiado tiempo disfrutando de los saltos en la cama elástica como para disfrutar de la gravedad cero en una miserable fracción de segundo.

Una vez informado del tema (y 2 horas después de darle la contra a mi amigo quien obviamente estaba en lo correcto), tuve que aceptar mi equivocación y por ende... la derrota. Me sentí mal, un tanto humillado por haber defendido fervientemente una equivocación, pero mi orgullo no iba a dejar que fuera el final de mi reputación. Terminado el debate con mi aceptación de los hechos, le dije a mi amigo "está bien, me equivoqué, no era así, pero en esta derrota tan vergonzosa pude sacar algo de provecho: ahora sé lo que es la gravedad 0 y cómo funciona"...

Nunca le dije que tenía razón, no pensaba hacerlo tampoco. Para qué darle el gusto de escribirle que estaba en lo correcto si ya le di el gusto de mostrarme que yo estaba equivocado... Me equivoqué, y perdí... pero no le dí la razón así que para mí él nunca ganó. Pensar así tampoco es tan malo, no sería catastrófico; admití mi error y de eso aprendo, lo cual es suficiente para mi desarrollo personal e intelectual... aunque nunca concederle a otros la victoria pueda ser un tema de soberbia. Es bueno y malo, uno se anula con el otro, es como +1-1, es igual que nada... cero. En fin, no veo la gravedad del asunto.

domingo, 13 de abril de 2008

5 horas para un título

Desde hace algunos días pensaba seriamente en crear un blog para escribir todas esas cosas que pienso pero no tengo a quién decírselas... básicamente porque a nadie le importa las cosas filosóficas que digo. Sinceramente ¿a quién le gustaría oír "el comportamiento humano es irracional e intrínseco, es recomendable no escudriñar en la filosofía de su actitud" cuando es taaaan fácil decir "pobrecito, está loco... no le hagas caso"? Muchas cosas pueden ser dichas de 10 formas, pero a veces buscamos la 10ma, la que parece la más profunda para poder plasmar una idea o concepto con mucha más fuerza y trascendencia.... Bueno, no todos lo hacen, solo aquellos que creen (creemos) que el lenguaje debe ser utilizado en todo su esplendor, haciendo gala de palabras relegadas por el tiempo y formas de pensar unicas y divinas para transmitir una idea tan simple como "mándate, no tienes nada que perder" o "no vengas a mí llorando si no me hiciste caso", asumiendo que decir esto de una forma más sofisticada seremos diferentes y, tal vez, "mejores" que los demás.

Para ser fiel a mi mentalidad de "la complejidad en el mensaje", me puse a pensar en un título ideal para el blog.... 5 horas después me vi acorralado entre la desesperación de no tener una idea concreta y el hecho de no contar con gente que pudiera aportar con algun título tentativo, algo que aunque no fuera de mi agrado, me evitara la angustia de pensar.

Todo comienza con el típico requisito para crear un nombre: "¿de qué estamos hablando?". Una vez definido esto, puedes buscar palabras relacionadas al tema. Luego de enlistar una serie de palabras, comienzas la asociación entre algunas, o citas una frase común que contenga dicha palabra, algo así como "gota a gota, el agua se agota" o "3 vasos de leche al día". Finalmente, con la frase o título definido, lo haces pasar por un control de calidad. Lo pasas por ahí y le preguntas a la gente si le gusta el título para un blog que habla de cosas sin sentido o qué sé yo. Con un promedio de 2 aprobaciones de 3 encuestados (asumiendo que si a 2 de 3 le gustó, le gustará a 4 de 6, 8 de 12, 16 de 24, etc, etc), el título está listo para ser aplicado y el objeto en cuestión ya puede ser expuesto al público con la plena seguridad que será aceptado por al menos el 60% de los consumidores.....

Bien... yo me ZURRÉ en todo eso. Pensé "qué título le pongo a este blog?". Y con cada segundo que pasaba la gota de saliva que corría por mejilla se iba alargando más y más mientras mi coeficiente intelectual iba disminuyendo a un ritmo directamente proporcional al tiempo que transcurría. Al pasar las 5 horas (y luego de 4 intentos frustrados de pedir ideas por MSN para un nombre) mi cerebro no servía ni para plantar una flor. En mi desesperación apareció una amiga mía que me mandó a rodar apenas terminé la frase "...y en base a eso necesito nombres para mi blog". Ni ella que me conoce tan bien pudo ayudarme... algo andaba mal definitivamente. Revisé mis conversaciones con cada persona donde explicaba el tema de mi blog, escribía los nombres que tenía en mente, y exigía que se cumplieran normas para la creación del nombre, además de una serie ilimitada de..... mmm.... una serie de IDIOTECES que al final no interesan, ¿por qué? pues porque el nombre no tiene que ser "osu!" para que sea un título. No creen? Entonces justifiquen la carencia de creatividad en los títulos de películas con números: Rambo, Rambo 2, Rambo 3, Rambo 4... Alguien se acuerda cuál era el título completo de Terminator 2? No, todos dicen "aah, la pela donde Arnol Chuarsneguer dice 'hasta la vista, baby'... muy buena!".

Entonces... ¿para qué pasar por un proceso? ¿Para qué encerrar un conecpto con un nombre elaborado si al final olvidarán el nombre pero recordarán el contenido? La respuesta es simple: tenemos que creer que el nombre es bueno, útil y aportará a la genialidad del "todo", y de ser así, otros lo recordarán y tu trabajo tendrá un nombre (largo y bonito) por el cual será identificado... no por una escena donde dices "hasta la vista, baby" o por una línea donde citaste un chisme de Magaly, colgaste la foto de una vedetucha calata, o te burlaste del angelito del 11. Qué mejor logro que crear algo bueno con un nombre difícil... y que recuerden todo, no?

Y es así como, ignorando lo que yo mismo escribí en líneas anteriores, decidí pensar en lo más ilógico sin ser ridículo y contradictorio, dando como conclusión un título desarrollado en 2 minutos, luego de 5 horas de improductiva meditación, todo para que a fin de cuentas... nadie se acuerde.