domingo, 9 de septiembre de 2012

Espectáculo de fin de semana

Llevando poco más de 1 mes sin dormir apropiadamente, ayer en la madrugada pude "asistir" a un espectáculo gratuito cerca a mi casa que comenzó a las 4am. Si no fuera por este pequeño evento, el sueño me habría hecho caer inconsciente en el suelo del cuarto de mi madre (detalles a continuación).

Todo comenzó cuando cometí el error de ir al cuarto de mi mamá a las 3am para revisar cómo estaban los 8 cachorros de mi perrita. Desde las 8 de la noche, no los escuchaba jugar, llorar, correr, morder-- se me ocurrió que algo podría andar mal, o tal vez el milagro que tanto estuve esperando finalmente llegó: sí, los 8 cachorros estaban profundamente dormidos. Y peor que villano de comedia, intenté irme sigilosamente, tratando de evadir cualquier periódico en el suelo que puediera hacer ruido al pisarlo. Al mínimo sonido, todos paran la oreja y empiezan a caminar como zombies hacia la fuente del sonido. Pero como a cualquier villano de comedia le pasaría... pisé el periódico "correcto", un pequeño "scrich", y se dio inicio al pandemonio.

En cuestión de segundos estaba rodeado de cachorros, los tenía colgando de mi pantalón, prendidos de mis zapatillas, algunos jugando valetodo a mis pies, gruñidos, rugidos, chillidos, de todo un poco. Pero lo más importante para mí era que ninguno llore. A esa hora usualmente se asoman a la puerta del cuarto, se paran sobre un baúl que tenemos como "tranca" y lloran, los 8, al unísono, para 1 de 3 cosas: comer, salir a ocuparse o jugar. El plato de comida estaba medio lleno, los periódicos estaban limpios y los 8 parecían estar bien descansados. Todo lo que hubieran necesitado estaba ahí: comida, lugar donde ocuparse, y yo para que jueguen un rato.

Una hora después, mi cordura estaba por agotarse, a diferencia de los cachorros, y si no hacía algo para salir de ahí sin alterarlos o dejarlos solos, iba a volverme loco. Cuando de repente, comienza el show. La calle queda totalmente en silencio, y se escucha a lo lejos "miren! YO voy a la tienda, está en Villarán, no es muy lejos; TÚ quédate con él, no vayan a ningún lado! Cuando regrese, TIENEN que estar acá!". Me acerqué despacio a la ventana y veo a 3 ebrios parados en la esquina, 2 de ellos CON SUS VASOS DE CERVEZA EN LA MANO, y uno parecía inconsciente, cargado entre los otros dos. Me parecía increíble que pudiera conservar lo que comió en su lugar. El que gritaba a todo pulmón se fue rumbo a la avenida, dejándole el "muerto" al otro borracho. El semi-inconsciente se despierta y empieza a caminar sin rumbo por la calle, arrastrando al otro que no tenía ni el balance ni el físico para cargar a alguien así, y los veía tambalearse por todos lados pensando "que se le caiga el vaso! QUE SE LE CAIGA EL VASO!" Seguí mirando, y el menos mareado le pregunta al otro, con tono claro y fuerte "NO, no te puedes ir, tenemos que esperar... ACÁ, tenemos que esperar acá, DEJA DE MOVERTE... mira, vamos a buscarte un taxi, donde vives?" Ahí intercede el 3ro, quien pensé que estaba totalmente destruído, pero aún podía hablar: "creo que es la avenida *tal*" (no recuerdo el nombre) y su "colgador" le dice "ya, pero te acuerdas de algo más? para dejarte en tu casa". El otro contesta "mi casa?? qué hablas yo quiero...." y se desploma pero lo sujetan a tiempo, y yo aún cruzando los dedos "AL SUELO, AL SUELO! LOS DOS AL SUELO! QUE BOTEN LA CHELA!!... A esta comedia le falta un poco de sazón..."

Los dos empezaron a caminar en sentido contrario a la avenida donde el "jefe" de la mancha dijo que iría, lo cual iba un poco en contra de las CLARAS Y ESPECÍFICAS INDICACIONES QUE LES DEJÓ ANTES DE IRSE LUEGO DE GRITAR... y creí que ahí había terminado el espectáculo. Un poco más tranquilo por el entretenimiento, me senté nuevamente y los cachorros seguíiiian jugando. Les dejé morderme el brazo, la mano, el pantalón, la ropa, uno metío un salto que casi se prende de mi cara. Me percaté que en lugar de cachorros, parecían crías de tiburón... malditos salvajes. Y al igual que el acto anterior, sin previo aviso, esucho un grito de mujer, corto pero a todo pulmón. Vi por la ventana y eran 2 parejas, pero no sé hasta qué punto eran pareja porque sí había un tipo con el brazo sobre el hombro de una chica, pero la otra pareja estaba aún en "términos". Aunque estaban algo lejos, y mi vista no era tan buena como cuando tenía 20 años (jojo), vi una mano mañosa que se arrastraba como serpiente por debajo de la cintura de una chica y ZAZ, mano al poto, bien prendida de una nalga, y otra vez el grito de la chica. La otra mujer le dice al tipo "la puedes dejar en paz??", y el otro, en "aparente (obvio) estado de ebriedad" dice "qué?? no entiendo qué pasa, cuál es el problema?" La víctima le decía "qué te pasa a tí! deja de hacer eso! qué te crees!", su abogada se entrometía, "no ves que la incomodas?" y el pintado del grupo seguía colgado de su enamorada, mirando el evento en primera fila. El otro no parecía tener ganas de detenerse, lo que obligó a la mini-ministra de la mujer a pararse entre los 2, y le pidió a su enamorado que vigile al chico, para que no se pase al otro lado. Lo que comenzó como una caminata de 2x2, se volvió una retirada de 1x4, la pobre sufrida iba de brazos cruzados, el caballerito "aguantado" no paraba de mirarle el monumento al trasero que le habían arrebatado, y la defensora de los inocentes caminaba mirando al horizonte, totalmente satisfecha por haber hecho la buena obra de, probablemente, toda su vida. Y el pintado, seguía colgado de su enamorada.

Cuando los perdí de vista, volví nuevamente a los cachorros... estos pequeños desgraciados no se cansaban y empezaba a ganarme el sueño. Casi inmediatamente escucho otra voz de mujer, gritándole a su pobre compañero (en este caso no pude distinguir si eran pareja u otra víctima del despreciable "friend zone"), lo que parecía ser una narración con encarnación de personajes. Ella iba hablando y le gritaba mientras representaba a cada persona de su cuento. Al principio creí que era pelea de novios donde la mujer grita hasta que le sangra la garganta, mientras el otro se sopla todos los gritos hasta que le sangren los oídos. Pero por la forma en la que la chica cambiaba de humor y tonos de voz, supe inmediatamente que se trataba de alguien con un problema de personalidades múltiples, o solamente era muy eufórica a la hora de narrar sus chismes, porque definitivamente estaba hablando de algo que no era de su incumbencia. En ninguna parte de sus gritos escuché alguna referencia de ella dentro del asunto, siempre era "ella le dijo", "entonces él le contestó", "le puso cara de esto", "la miró así de feo"... Y en menos de 2 minutos cruzaron la calle y no los volví a ver... Pero aún se le escuchaba a cuadras.

Rendido, nueeevamente volví a los cachorros, ellos estaban algo cansados (por fin!) y uno a uno se iban quedando dormidos a mi costado, algunos recostados sobre mí, e inlcuso echados, DORMIDOS, sobre mi. Los fui moviendo despacio, uno a uno, hasta que los 8 quedaron cómodos y dormidos en su cama. Finalmente, a las 6am, pude salir de ahí. Fui por algo de tomar, cuando escucho "NO NO!!! déjalo ahí, a ver, que se siente ahí". Me serví agua tan rápido como pude, con derramada y todo, y fui corriendo a ver lo que pasaba, esta vez desde mi ventana. Era el regreso del ente ambulante y el líder gritón, pero habían llevado a un invitado especial, era simplemente un brazo más para el perchero, porque cargar al ebrio entre 2 era muy complicado. Con indicaciones emitidas desde el diafragma, el líder de la manada le indicaba a los otros 2 cómo levantar al pobre tipo que por la cara que tenía, parecía que no sabía si todavía seguía en la tierra, ebrio o sobrio. Lo cargaron, y empezaron a caminar hacia la avenida frente a mi casa, mientras conversaban sobre banalidades de la vida, riéndose y haciendo ademanes, como si no estuvieran llevando a alguien que pudiera haber necesitado ayuda médica por el grado de intoxicación que tenía.

El show había terminado exitosamente, con el mismo espectáculo con el que comenzó. Fue increíble, para ponerse de pie y aplaudir. Dicen que ir al teatro vuelve culta a la gente, pero yo prefiero quedarme bruto si puedo ver esto gratis cualquier fin de semana.

Lo mejor de lo mejor de ese evento: a las 5am, entre gritos y ruido del espectáculo, los cachorros empezaron a lloraron por un rato, mi madre abrió ligeramente un ojo y dijo "creo que tienen hambre... ponla a Bruna" y se durmió.